El valor de decirle adiós a los fantasmas...

Con la copa medio vacia y el cenicero lleno, sentada a media luz en la estancia de mi casa me encuentro... ¿Te preguntas el porque de tan bohemio ambiente?

Yo te puedo contestar... reflexiones, cuestionamientos, incursiones a lo hondo del alma que febril arde en las llamas de la desolación... tal vez esas sean mis razones...

Y es que dandome vueltas en la cabeza un pensamiento largo rato ha estado. Trato d explicarme como sucedió, tampoco se si la culpable soy yo por creer en lo intangible ó si el destino - si es verdadera su existencia- quiso que todo transcurriera de la forma en que pasaron las cosas...

Un encuentro fortuito, un estudio analítico a la personalidad del otro, cada quien buscando lo creyó importante, después de unos minutos fuimos dos personas enfrascadas en una conversación apasionante, adictiva, tonta, sin sentido ni dirección, imaginativa, creativa y si por que no decirlo también utópica, fantasiosa y única... pero plagada de verdades intimas de esas que se guardan solo para personas que son capaces de entender lo que se les narra, definimos pequeños pedazos de nuestras vidas y describiendo sentimientos, actitudes, lugares, personas, cosas, entornos... nos conocimos... así llego en comienzo.

Memorable... muy memorable...

No se si tu fantasma se ira, no se si realmente lo quiero dejar ir... puede ser que ahora sea fiel seguidora del Masoquismo... la verdad de lo unico de lo que estoy segura es que necesito otra copa... una mas para el dolor.

Solo una...

ACLARACIONES

No pretendo que tu que me lees -con la magia del internet nunca se sabe quien ve tus letras- comprendas, solo busco satisfacer la extraña necesidad de hacer publica mi intimidad... dejar fluir el efluvio mental, así que si no comprendes ni la mas mínima razón de mi palabra pasmada en esta ferviente y lastimera queja te diré... No importa... algún día lo harás.

Inspiracion regresa a mi, a mi que te he perdido...

Siento temor, presiento que de mi la inspiracion huyo, no te siento en mi soledad, ¿Que a sido de ti? ¿Es acaso que el, tambien te llevo consigo? me has abandonado, lo siento cuando al buscar las palabras, en callada derrota me encuentronada me queda ya, no se que hacer, que decirsolo puedo sentir dentro de miun cumulo de sentimientos que sin tino puedo explicar, vacia, hueca me has dejado, la unica que me ayudaba a ignorar el dolor que en mi interior vive.
¿Como hare ahora para contarle lo que siento? para escribirle cartas de amor, para sacar mis sentimientoste alejas y contigo mis palabras tambien, te cansaste de mi melancolico pesar, lo se
¿En busqueda de quien escriba de Felicidad y Amor has salido?
Alguna vez tu y yo escribimos de esos temas, ¿recuerdas? cuando el rozar del viento no me hacia daño, cuando los amaneceres me hacian aspirar hondo muy hondo, como si pretendiera tocar el alma con mi pecho, que dias aquellos... dias, que son tan lejanos a mi ahora... no te culpo, por marchar en busca de mejores sentiemientos, de rios de bondad, amor y esperanzase que conmigo morias poco a poco, pues seca me he quedado...
El mundo es tan bello y la vida tan corta, que de nada sirve lamentarsepor lo perdido, ¿Yo? lo se, pero no lo entiendo...
En tu lugar la melancolia y la desesperacion han quedado, ella son mis compañeras ahora, mis dueñas... mi escritorio vacio quedo, sin rastro de tinta ni hojas esta, nadie se acerca a el ahora que me dejaste, mi cama es la nueva trinchera, con sabanas de una mortecina palidez me cubro, tratando de escondeme de ellas estoy, pero mi respirar me delata, me atrapan y me llenan de su esencia.
Regresa ¡¡por favor!
Ven a mi, a mi que tanto te busco, que tanto te necesito... que tanto te amo... quiero volver al tintero... no llorare sobre ti...
Inspiracion regresa a mi...

CONNIE ZEPEDA.

Reencuentro..

Cruzó los cielosvolo hacia mi se poso en mi manoy aspiro con fuerza... un largo viaje fue, pero no importaahora esta aqui conmigoencontro su verdad en mi, la siento feliz... y en paz
En silencio la contemplo... mi alma esta en su lugar...

CONNIE ZEPEDA.

Ensoñaciones del alma mia...

No quiero pensar, no quiero oir, no quiero ver, no quiero sentir...
Inmune a todo sersin esencia estarquiero flotary como una hoja dejarme llevar
Ser sin existiraparecer como... una coincidencia, una ocasion, algo esporadico, un suceso inesperado
Caer dentro de miundirme en mi centro, profunda seraenconderme de la realidady encontrar mi felicidad
Se que no soy real, me debo inventar...
No eh de buscar nada, no quiero esperar algo.
Solo deseo existir sin serdivagar, caminarvolar y viajar
Ser libre, sin frontera alguna transitar...
Una gota sedienta de infinitouna poesia que el alma recitauna cancion que alguien canta
Sin nombre, sin recuerdos
Deseo sentirme vivaque alma, corazon y mente sean codependientes
Caminar sin tiempo, sin espaciosin prisas, sin demoras
En momentos exactoslevantar el vuelo y perderme en la inmensidad del cielover el fulgor de las estrellas y formar parte de ellas
Respirar del mary en su oleaje perdermenadar en sus aguasentregarme a sus entrañas
Morir al respirar profundonacer a la vida a cada segundodecir, pronunciar y gritar
Ser destino y oportunidaddelirio y realidad...
Cerrar los ojos yborrar lo gritos del mundo, los quiero hacer callar
Sin miedos vivirlas preocupaciones abolir...
Unirme en nativa existencia a la vida mismasaber que es real, lo puedo sentirque todo es posible al cantar y con solo desear
A todo pulmon respirar...
Crear, imaginar, dejarme fluir...
Que en ensoñaciones eh decidico hoy vivir...

CONNIE ZEPEDA.

Mis manos amordazadas...

Jure no volver a escribir más de tipero no puedo arrancarte de mis entrañas donde te has enraizadoun torrente de emociones se arremolinan dentro de mí, abriéndose pasó a la luz, hambrientos de serme exigen existencia... salen a trompicones y atropelladamente por las grandes puertas de mi concienciaveo con asombro como mis manos intentan desesperadasgarabatear las oraciones acuñadas en mis adentros, que en la oscuridad de mi alma solo lograron tomar fortalezay ahora salen mas densos que nunca... insaciables son mis ganas de escribir, por que por un tiempo fueron privadasamordazadas, se les impidió ser libres...
La única culpable soy yoquise hacerlas callar, no quería oírlaspensé que lo lograría, pero hoy gritan con más fuerza.

CONNIE ZEPEDA.

Andanzas...

Caminando por la playa me entregaba completamente a las sensaciones… mi piel atenta a la caricia del viento, mis pies se movían con nativa elegancia disfrutando de la granulosa senda que recorrían, mis ojos apreciaban los matices malva de un atardecer prematuro en donde la mente se deja caer librey emprendía el vuelo en un paisaje de donde pude jurar yo era la única habitante, no recuerdo cuanto tiempo camine ni a que sito me llevaron mis pasos, lo único que importaba y llenaba mi interior era la imperiosa necesidad de tirarme en la arena y palpar aquella alfombra de textura indescriptible, y empero que me recostara sobre la cama de las sirenas, haciendo oído agudo intente descifrar lo que el mar me contaba con cada llegar de su oleaje, pronto me encontré en un estado de pasma total… flote, viaje, me eleve… mi mente que siempre ha sido de paso ligero e inalcanzable en sus divagares al verse totalmente en libertad y con una sitio tan inmaculado como escenario galopo en el viento salobre en busca de sus mas secretos soñares.
De esta forma la oscuridad me sorprendió y mi viaje especulativo quedo congelado en un tiempo y lugar que en futuros andares en las costas buscare reiniciar, vivir y volver a sentir.
Mas, aun cuando mi concentración se vio desequilibrada por un cielo negro con estrellas que poco a poco se fueron vislumbrando pensé y supe que ese mismo firmamento que ahora cubría mis anhelos de libertad te observaba y seguía tus pasos…
De pronto, me sorprendi ypronunciando tu nombre. .. Marco. .. volvi mis ojos al cielo y me di cuenta.
Ahora se que hay algo que nos une, algo que podemos asegurar compartimos fielmente… si, el firmamento y las estrellas, pensando esto comencé a sonreír y camine desasiendo los paso antes andados… una caminata a la vida real… a la realidad.

CONNIE ZEPEDA